¿Qué te viene a la mente cuando
escuchas la palabra Venezuela?
Independientemente de si eres oriundo
de estas tierras o de otra nacionalidad, seguramente un descriptor presente en
el top ofthemind generalizado es crisis; sin embargo, esa
palabra pareciera quedarse corta para el venezolano, que frecuenta describir la
situación como desesperante, insólita e invivible.
Diana Hernández (*)
Los expertos en materia económica y
política, como Asdrúbal Oliveros, afirman que no hay período de hiperinflación
que dure 100 años ni cuerpo que lo resista, el tema es que cada día, cada
segundo pareciera una eternidad para quienes tienen el reto de vivir dentro de
las fronteras de la pequeña Venezia y los demás que aunque estén fuera, siguen
siendo parte del sistema y viven con otros ojos la realidad, también según
psicólogos se debaten entre la culpa, la frustración y la necesidad.
Ya los expertos en Hiperinflación nos
han estado dando detalles de cómo está la situación económica y política, recomiendo
en ese sentido el artículo de Prodavinci sobre este tema.
En términos emocionales y
psicosociales muchas veces nos encontramos en un limbo, en el cual desaparece
el todo y todos, nos estamos ahogando y no encontramos mano amiga, se nos
arruga el corazón y se activa un coctel de emociones al ver a todos tomando
vuelo, incluida la esperanza, dejando atrás la Cromo interferencia
de Carlos Cruz Diez; repensamos, cambiamos la mirada y recordamos que estamos
en la Tierra de Gracia, con paisajes
y playas hermosas pero … “boom”… nos están dando tremenda movida, y ¡vaya
movida!; tomamos aire y fuerzas, y arrastrados, logramos salir y nos lanzamos
en la arena; no hemos terminado de tomar fuerzas, pero tristemente ¡ahora sí se
cumplió el pronóstico de INAMEH! y nos azota un evento climatológico, y sí,
sólo nos quedan dos opciones: nos dejamos llevar por los fuertes vientos y el
agua sin rumbo ni destino conocido, y cuando ya creemos que no podemos más,
escuchamos a lo lejos una segunda opción: “agárrate de tu palmera”, a lo Víctor
Maldonado. Y yo elijo, así como muchos venezolanos, agarrarme de mi palmera y
recordar que aunque en una maleta no me puedo llevar el Ávila, mis hermosas
guacamayas, las arepas o a los panas, tengo una maleta cerebral que puedo ir
llenando, casi sin fondo, con herramientas para la vida.
Porque así como la
perla se crea luego de un proceso de transformación que implica heridas y
dolor, nosotros también saldremos transformados de esta situación si elegimos A.C.T.U.A.R.
Basados en teorías de
bienestar, psicología positiva y cerebro triuno, ese actuar debe centrarse en,
entre otros elementos:
Apreciar constantemente a cada persona y oportunidad de aprendizaje que tenemos diariamente.
Compartir nuestras penas y glorias con nuestras redes sociales, las de verdad, esas constituidas por nuestros amigos, familiares, seres queridos, teniendo presente la importancia de comunicarnos con respeto. Se sugiere revisar la propuesta de diálogo, negociación y acuerdos de Elaine De Beauport y Aura Sofía Díaz basada en la emoción, la palabra y la acción.
Teamwork - Unión: porque sólo en equipo podremos gestionar mejor la complejidad en la cual nos encontramos inmersos.
Actitud positiva que implica, esa que implica reconocer la realidad en su completitud
Responsabilidad compartida, porque lo que me pasa y lo que nos pasa es responsabilidad de todos y cada uno de nosotros, en consecuencia es preciso que reconozcamos esto, que dejemos de buscar culpables y nos centremos en trabajar por la solución, preguntándonos más bien ¿qué puedo hacer al respecto?
Apreciar constantemente a cada persona y oportunidad de aprendizaje que tenemos diariamente.
Compartir nuestras penas y glorias con nuestras redes sociales, las de verdad, esas constituidas por nuestros amigos, familiares, seres queridos, teniendo presente la importancia de comunicarnos con respeto. Se sugiere revisar la propuesta de diálogo, negociación y acuerdos de Elaine De Beauport y Aura Sofía Díaz basada en la emoción, la palabra y la acción.
Teamwork - Unión: porque sólo en equipo podremos gestionar mejor la complejidad en la cual nos encontramos inmersos.
Actitud positiva que implica, esa que implica reconocer la realidad en su completitud
Responsabilidad compartida, porque lo que me pasa y lo que nos pasa es responsabilidad de todos y cada uno de nosotros, en consecuencia es preciso que reconozcamos esto, que dejemos de buscar culpables y nos centremos en trabajar por la solución, preguntándonos más bien ¿qué puedo hacer al respecto?
Es decir, requerimos A.C.T.U.A.R.
teniendo como centro que cada persona es sagrada, que el aporte de cada uno de
es importante, que la diversidad de opiniones es fundamental para juntos
construir las mejores soluciones.
En Hiperinflación, tendemos a
centrarnos en buscar mecanismos para tratar los riesgos económicos, financieros,
políticos, etc. Y quizá damos menos peso a los riesgos psicosociales que
aumentan también de forma exponencial en este tipo de situaciones y son la base
para tratar los primeros riesgos mencionados; sólo con personas con ciertos
niveles de bienestar podremos tomar las mejores decisiones posibles.
Asumamos nuestra responsabilidad con
nosotros mismos, por nuestro bienestar, como base para contribuir a desarrollar
los cambios que queremos ver en el mundo, y en especial en nuestro país. Y tú
¿cómo te agarras de tu palmera? A armar y usar nuestra caja de herramientas,
seguro así salvaré mi propia estrella de mar y algunas otras más.
(*) Magister Scientiarum en
Gerencia Empresarial.
Doctoranda
en Gerencia.
Profesora,
impulsora de programas y proyectos multisectoriales en pro del bienestar
social.
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